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VIENTO EN POPA A TODA VELA

La contra crónica del Mallorca 2-1 Cartagena

No soy marinero y ni tan siquiera sé nada del mar, más que varios baños en verano, eso sí; siento una nostalgia póstuma cada vez que lo contemplo y así de vez en cuando lo miro y el mar me cuenta cosas ¿o se las cuento yo ?, con la embriaguez de las olas ya no me queda claro.

 Perdón por la parodia poética, pero es que quería comparar al Mallorca con un velero en esta batalla mediterránea con sus vecinos marítimos.

Un velero al que casi siempre sopla el viento favorable, pero conviene recordar ciertas borrascas y marea alta recién estrenado saliendo del puerto que provocaron el recuerdo de aquella canción que evocaba al barquito chiquitito que no podía navegar.

Las tormentas veraniegas se presentaron en forma de descenso con las dudas y el temor que da bajar al infierno, además huido el capitán del barco a veleros de mayor eslora nos trajo un nuevo almirante que no convence y más con su rajada en rueda de prensa tras  la derrota ante los bucaneros vallecanos, piratas de secano que nos dejaron instalados en el miedo con la  inminente visita a aguas pericas que llegaba demasiado pronto, el empate dio algo de alivio, el sufrido triunfo ante el Sabadell nos devolvió a la realidad y empezar a creer que era demasiado mar para navegar y para más tambaleo de proa a popa y de babor a estribor el grumete goleador dice que se va, lo dicho aguas turbias en la jornada 3.

¿Y a partir de aquí qué? Pues que los marineros se pusieron manos a la obra y empezaron a superar cada ola, a conquistar cada puerto.

La victoria de ayer del Mallorca debe ser como cuando superas ese acantilado que tapa la vista hacia atrás y te giras y no ves a tus seguidores imagino que la inyección de moral en la tropa es como para plegar las velas y terminar de llegar a remo, sentirse como la armada invencible.

Una cosa queda clara, si el Mallorca juega mal gana, si juega bien gana, da igual lo que haga siempre gana…

Da igual si no hay rotaciones, da igual el momento de forma del rival, da igual los cambios el final es siempre el mismo, más tres en la cuenta de los puntos.

Ayer partido duro, difícil, bien jugado a ratos, rápidos, precisos, cuando peor estábamos apareció Reina, en este momento el Cartagena hacia cosas bien, juntaba un buen numero de pases seguidos sin que el Mallorca consiguiera robar y atacaba los pasillos interiores que dejaba la proyección en ataque de Sastre y Cufré.

El susto en el cuerpo que dejo el error imposible de Rubén Castro tras la parada salvadora de Reina le hizo ver a los marineros que estas olas no iban a ser fáciles de sobre pasar no sin varios zarandeos.

 Volvió el Mallorca a tomar los mandos del partido alejando al rival de su área y arrinconándolo cada vez más en la propia y cuando empezábamos a maldecir que la primera parte se quedaba corta apareció la magia de Salva Sevilla para ponerle un balón imposible de gol a la pantera. Una pantera que cada vez que sale a correr en diagonal a la portería rival es imparable, desmarque, sprint, toque sutil de primeras y la pelota a guardar en la red, gol 1-0, yo también pido libertad para Senegal…

La segunda parte te deja claro que esta categoría es muy difícil, con menos velocidad, con menos brillo, aunque igual de bien llevado por los chicos de Luis García Plaza, partido controlado pero claro resultado corto ya se sabe…jugada aislada, balón parado, despeje a la frontal del área, balón cogido a bote pronto y claro Manolo Reina no es el hombre de goma, imposible de parar, gol 1-1. A veces hacer muchas cosas bien no es aval para ganar.

Quedaba tiempo, el suficiente para volver a marcar. Se venia un correcalles y en esas el balón le llego a la pantera, para mí se precipita en el tiro a puerta yo le pedía que aguantara la conducción y esperase a Cufre que llegaba solo por su izquierda, pero claro Amath es delantero yo solo un comentarista, tiro, rechace, lastima ocasión perdida y es que aun no tenemos interiorizado que en el futbol moderno juegas con doce, a veces con diez, el VAR, bendito VAR, imagen congelada se ve penalti claro. Tira Giménez, gol, golazo …2-1.

Y de ahí al final el velero mallorquinista supo llegar a puerto sin más sobre saltos que no fueron pocos, lluvia, mar embravecido por un rival orgulloso, correoso. El resultado corto no reflejo el juego, el control, el dominio.

Una victoria de ascenso, más cerca y el domingo el torpedero sportinguista, nos esperan las frías aguas atlánticas, se prevén algunos cañonazos en el casco del velero, ojo a Djuka, da igual ya sabéis lo que siempre pasa…

 

Foto: LFP. 


Rubén Sarrión

Entrenador nacional de futbol desde el año 2012 (Nivel 3)

En los banquillos desde 1994 y en la actualidad entrenador del CDA Llubí de Regional Preferente.

Analista de Radio Esport en Radio Balear.

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