El hecho de que el Mallorca se clasificase para los cuartos de final de la Copa del Rey después de diez años sin que el equipo mallorquinista se plantase en las rondas finales del trofeo más “preciado” que se custodia en las vitrinas de Son Moix logrado en 2003 en Elche y donde el Real Mallorca ha escrito importantes gestas que hoy en día se conservan en el imaginario colectivo del mallorquinismo.
Dejemos la Historia del club para los historiadores en un rincón al que siempre hay que volver porque son las raíces de un club que nos ha dado mucho a todos y que en algunos aspectos la propiedad actual parece no tener en cuenta, La intención de este articulo no es una crítica sobre cómo se está tratando a los 106 años de vida del Real Mallorca como club y que desde mi punto de vista como historiador daría para muchos artículos.
La importancia de la victoria de ayer tiene para mi varias lecturas que intentaré desentrañar un poco en estas líneas:
Aunque en los últimos dos años la rivalidad con el Espanyol se ha ido acentuando más desde la marcha de Vicente Moreno al club “perico” y con las formas que todos conocemos. En lo que el ex míster del Real Mallorca si hubiera ganado en la que fue su casa habría sido una forma de hurgar en la herida del mallorquinismo que durante la semana pasada el entorno mediático ya comenzaba a vislumbrar tormentas dentro del vestuario y mal ambiente con lo cual creo estas informaciones debieron de espolear a los jugadores a centrarse para conseguir la victoria que ayer. Un triunfo que no solamente supone la clasificación para los cuartos de final de la Copa del Rey sino también debería de aportar mucha tranquilidad a esta escuadra que entrena Luis García Plaza y que en las últimas semanas ha tenido que escuchar o leer todo tipo de criticas no sólo de la opinión pública sino también de los propios aficionados. Unas criticas que a veces traspasan líneas rojas, que pasan de ser criticas constructivas en las que todos pueden decir aquellas cosas que se han hecho mal y otro tipo de críticas que son destructivas.
Acerca de las criticas destructivas hacia el equipo me da la sensación de que demuestran una desunión entre los aficionados y eso personalmente, no me gusta. Es muy sencillo, hace siete años aprendimos todos los mallorquinistas una lección: “Una afición desunida nos lleva al infierno” Todos sabemos como acabó la historia y para ello, tuvimos a recurrir a un hashtag que se hizo viral entre los mallorquinistas #TocaRemar en que todos los aficionados, salvo excepciones; siempre estuvieron del lado del Real Mallorca y entre todos fuimos el jugador número doce que necesitaba la plantilla para salir del fango de la Segunda B y dos años después volver a Primera. Hace dos temporadas descendimos y el año pasado sobrevivimos a una pandemia… ¿Qué ha pasado gente? ¿No seguís confiando en este equipo?
La victoria de ayer nos tiene que servir también y debería de hacerles ver a los jugadores que si muestran la actitud de ayer pero también las ganas que pusieron sobre el verde de Son Moix no hay rival que les pueda toser. “Chicos está en vosotros” y con una afición como la mallorquinista… tiene que hacerles más fuertes. Ahora toca ya pensar en la liga, ya que se visita al Villarreal en su estadio… un rival con quien los mallorquinistas… “tenemos viejas rencillas” por una eliminación en los despachos de la Copa de la UEFA.
Por último, estamos en la segunda ventana del mercado de la temporada, en la que se han producido tres salidas (Lago, Joan Sastre y Aleix Febas) por tanto estas bajas deberían cubrirse con jugadores de garantías que puedan ofrecer a Luis García Plaza un mayor abanico de posibilidades a la hora de hacer las alineaciones; y también apostar desde club por la llegada de un delantero centro que marque las diferencias. Por tanto, señor Pablo Ortells póngase a trabajar; se entiende que no hay mucho dinero (lo cual llevaría a muchas reflexiones como por ejemplo… si la propiedad ha invertido dinero en los Phoenix Suns de la NBA y que están haciendo unas temporadas muy buenas. ¿No podrían poner unos dólares en ese club que hay en una isla llamada Mallorca?) por eso aquellas palabras de Mateu Alemany hace años que decía: “El mayor patrimonio que tiene el Mallorca es la Primera División” deberían de estar inscritas de alguna forma en todos los rincones de Son Moix. ¡Póngase a trabajar señor Ortells!
